Hígado Graso: Todo lo que debemos saber sobre esta enfermedad
El hígado es un órgano esencial y el más grande dentro de nuestro cuerpo. Participa en funciones vitales como la digestión de alimentos, el almacenamiento de energía y la eliminación de toxinas.
Sin embargo, el hígado puede ser susceptible a diversas enfermedades, incluida la enfermedad del hígado graso, una afección en la que el hígado acumula exceso de grasa.
Esta enfermedad puede presentarse en dos formas principales: la enfermedad del hígado graso no alcohólico y la enfermedad del hígado graso alcohólico, también conocida como esteatosis hepática alcohólica.
Una de las maneras más recomendables para proteger y regenerar la función hepática es tomar un depurativo de origen natural como Regis H Silimarina que proporciona los siguientes beneficios a personas que padecen la Enfermedad del Hígado Graso
- Acción anti-oxidante, activando el mecanismo de protección celular.
- Refuerza las defensas en gripes, catarros, neumonías, etc.
- Depurativo y Diurético.
- Facilita el funcionamiento del tracto intestinal y hepático.
- Elimina toxinas a nivel hepático.
Enfermedad del Hígado Graso No Alcohólico y Alcohólico
La enfermedad del hígado graso no alcohólico (EHGNA), no está relacionada con el consumo de alcohol, pero incluye dos subtipos: hígado graso simple y esteatosis hepática no alcohólica.
En el hígado graso simple, la grasa se acumula en el hígado, pero la inflamación y el daño a las células hepáticas son mínimos o inexistentes.
Sin embargo, en la esteatosis hepática no alcohólica, la inflamación y el daño a las células hepáticas son evidentes y pueden conducir a la cicatrización del hígado (fibrosis), cirrosis y cáncer de hígado.
En contraste, la enfermedad del hígado graso por alcohol se debe al consumo excesivo de alcohol. El proceso de descomposición del alcohol en el hígado puede generar sustancias dañinas que dañan las células hepáticas,. Además de provocar inflamación y debilitar las defensas del cuerpo. A largo plazo, el consumo excesivo de alcohol puede llevar a la enfermedad del hígado graso alcohólico, la hepatitis alcohólica y, finalmente, la cirrosis.
Riesgos
El riesgo de enfermedad del hígado graso no se comprende completamente. Aunque se sabe que es más común en individuos con diabetes tipo 2, obesidad, altos niveles de lípidos en sangre, presión arterial alta, ciertos trastornos metabólicos y aquellos que han estado expuestos a ciertas toxinas.
Aproximadamente el 25% de la población mundial padece de la enfermedad del hígado graso. Cifra que refleja las crecientes tasas de obesidad, diabetes tipo 2 y colesterol alto. Por otro lado, la enfermedad del hígado graso por alcohol solo ocurre en personas que consumen mucho alcohol. Particularmente aquellos que han estado bebiendo durante un largo período de tiempo. El riesgo es mayor en bebedores empedernidos de alcohol obesos, mujeres o personas con ciertas mutaciones genéticas.
Síntomas de la EHGNA
En la mayoría de los casos, la EHGNA es una enfermedad silente, es decir, no presenta síntomas. Incluso cuando se desarrolla cirrosis (una etapa avanzada de la enfermedad hepática), provocada por la EHNA, los pacientes pueden no tener síntomas.
No obstante, si los síntomas se manifiestan, los pacientes pueden sentirse fatigados o experimentar molestias en la parte superior derecha del abdomen.
Causas de la Enfermedad del Hígado Graso
Aunque los expertos continúan estudiando las causas de la EHGNA, se ha encontrado una serie de factores de riesgo asociados con la enfermedad. Estos factores pueden incluir ciertas afecciones de salud, la genética, la dieta y el aparato digestivo.
1.-Condiciones de Salud
Se ha encontrado que ciertas condiciones de salud pueden hacer que una persona sea más propensa a desarrollar EHGNA. Estas condiciones incluyen:
- Sobrepeso u obesidad
- Resistencia a la insulina o diabetes tipo 2
- Niveles anormales de grasas en la sangre, que pueden incluir altas concentraciones de triglicéridos y colesterol
- Síndrome metabólico, una condición caracterizada por un grupo de rasgos y afecciones médicas relacionadas con el sobrepeso y la obesidad.
Además, los estudios han demostrado que la pérdida de peso puede convertir la EHNA en HGNA y, de la misma manera, el aumento de peso puede convertir el HGNA en EHNA.
2.-Genes
Investigaciones recientes han identificado ciertos genes que podrían aumentar la susceptibilidad a desarrollar EHGNA. Esto podría ayudar a explicar por qué la EHGNA es más común en algunos grupos raciales y étnicos.
3.-Dieta y Aparato Digestivo
Algunos estudios sugieren que las dietas ricas en fructosa, un tipo de azúcar presente en el azúcar de mesa y que a menudo se añade a las bebidas y alimentos para endulzarlos, pueden aumentar el riesgo de desarrollar EHGNA. Además, se ha estudiado la relación entre los microbiomas (bacterias en el tubo digestivo que ayudan con la digestión) y la EHGNA. Los expertos continúan estudiando cómo los microbiomas pueden influir en la enfermedad.
Diagnóstico y Tratamiento de la Enfermedad del Hígado Graso
El diagnóstico de la enfermedad del hígado graso se basa en la historia clínica del paciente, un examen físico y varias pruebas, que incluyen análisis de sangre y pruebas de imagen. En algunos casos, se puede requerir una biopsia hepática para confirmar el diagnóstico y determinar la gravedad del daño al hígado.
Para el tratamiento de la enfermedad del hígado graso no alcohólico, la pérdida de peso es una recomendación principal. Reducir el peso puede disminuir la grasa, la inflamación y la fibrosis en el hígado. Aunque no hay medicamentos específicamente aprobados para tratar el hígado graso, se están realizando investigaciones sobre la eficacia de ciertos medicamentos para la diabetes y la vitamina E.
La intervención más importante para tratar la enfermedad del hígado graso por alcohol es abstenerse de beber alcohol. Puede requerirse la participación en un programa de rehabilitación por consumo de alcohol o la intervención de un terapeuta. Hay medicamentos disponibles que pueden reducir los antojos de alcohol o causar malestar si se consume alcohol.
Como hemos comentado anteriormente hay complementos alimenticios como Regis H Silimarina que se obtienen de extractos de plantas y que gracias a sus propiedades protegen y regeneran el hígado.
Cambios de Estilo de Vida
Independientemente del tipo de enfermedad del hígado graso, ciertos cambios en el estilo de vida pueden ser útiles, incluyendo el consumo de una dieta saludable, la vacunación contra la hepatitis A y B, el ejercicio regular y el asesoramiento antes de usar suplementos dietéticos o medicamentos.
La combinación de una atención médica adecuada y la adopción de hábitos de vida saludables puede resultar en la mejora de la salud del hígado y la prevención de las complicaciones a largo plazo de la enfermedad del hígado graso.
Para finalizar destacar que la Enfermedad del Hígado graso No Alcohólico (EHGNA) es una condición compleja con múltiples factores de riesgo. La ausencia de síntomas notables la hace difícil de detectar en sus etapas tempranas, lo que subraya la importancia de realizar chequeos de salud regulares y mantener un estilo de vida saludable para prevenir la enfermedad.